domingo, 24 de enero de 2010

Digo que no importa, que no pienso en vos. ‘No me afecta’ es mi frase preferida. Y riendo zafo de preguntas que me incomoda contestar. Repito que no soy tan estúpida como para pensar en alguien que no piensa en mí. Pero debo admitir que sí lo soy. Sé que es inútil darle vueltas al asunto. Pero las cosas inútiles son mi especialidad. Y soñar, imaginar, inventar, llorar por lo que no importa, y tener diez años, son cosas que aún hago. Y cómo fue que empecé a darle tanta importancia a algo que no la tiene? No hizo nada malo. Pero en mi cabeza retumba ‘lo odio, lo odio’. Y otra voz, todavía un poco más estúpida, grita ‘lo amo’, aunque sé que eso es un engaño. Te valoro por cómo actúas con los demás, porque a mí ni siquiera me tratás mal. Trato de encajar con alguien que no encaja con nadie más. Demasiado egoísta para mí. Pero insistir en casos perdidos es mi nuevo pasatiempo. Mi teoría es que invento sentimientos porque estoy demasiado vacía de ellos. Tengo bien en claro lo confundida y equivocada que estoy, pero eso no ayuda a corregirme. Estoy acá sentada, escribiendo sobre algo poco interesante, pero si alguien puediera ver en mi cabeza, está tan desorganizada, que aseguro no se aburriría tanto. La misma historia una vez más, con otro protagonista. Tal vez la protagonista sea yo, y la historia simplemente sea sobre una chica que confunde lo que quiere con la realidad ~


-

No hay comentarios:

Publicar un comentario