lunes, 24 de agosto de 2009

Todos cometemos errores, todos nos equivocamos, pero también todos tenemos alarmas, una voz en lo más profundo de nuestra alma que nos dice “te estás equivocando, no lo hagas”, el error es no escuchar esa voz, es no reaccionar ante esa alarma.
Y aunque te pierdas, aunque equivoques el camino siempre va a estar esa voz, esa voz que en lo más profundo de tu alma te marca el camino y te dice
“hey, ¿Donde estás?, ¿Donde estás?”.


No hay comentarios:

Publicar un comentario